LA LOBERA
Habrá sol,
rumor de brisa entre las hojas
y un musgo de amarillo tibio
invadirá sendas y peñascos.
Bajo el arco,
promesa abierta en realidades,
florecerá un poema
y al fondo,
murmullos, cuchicheos
y el correr del agua
entre las calas.
Junto a la lumbre
se escuchará un rasgueo.
Y llegará la noche
cuajada de esplendores
con el calor de las miradas,
las risas y los versos.
Castaño agua en una puerta
y un hueco oscuro
sin mí.
.
Rosario, castaño agua nunca está oscuro porque allí tú fuiste presencia.
ResponderEliminarMe encanta este poema.
Un beso grande, grande...
Laura
Y... ¡castaño agua! te tocó en suerte.
ResponderEliminar¡Cómo recuerdo siempre este poema! Además tuve el honor y la suerte de leerlo yo ese año en que no estuviste tú, pero sí estuvo este poema tuyo. Así que ¡algo de tí, pululaba por allí!, siempre.
Me parece un poema tierno y certero. Le tengo mucho cariño.
Besos